Así se llama el programa de Koki Salgado donde emite hits de los 60s, 70s y también algo más recientes. Todos nos llegan directo al corazón, nos recuerdan momentos gratos y también de los otros. Ellos asociados al clásico lonche que cada día pierde vigencia por los apuros de la vida diaria.
En el lonche no podía faltar el pan caliente de Rovegno, Don Jesús o incluso Romeo, el que se servía con mantequilla, algún tipo de jamonada o las riquisimas mermeladas hechas por mi madre.
De tomar siempre había leche con Ovaltine o Nescao y cuando el presupuesto lo permitía había bizcochuelos o tortas directos del horno de la casa.
Qué tiempos aquellos donde no importaba tanto qué había sino la compañía de mis padres y hermanos. Su presencia añoro.La de mis padres porque dejaron este mundo y mis hermanos por su lejanía. Añoranza de todos por quienes no están presentes y que esperamos su presencia o su regreso. Algunas ya no será posible pues su presencia solo es espiritual pero en otros casos depende de una decisión de regresar.
Hoy escribo al caer la tarde, horario desacostumbrado en cual hace frío. En otras partes del mundo duermen o ya se preparaban para pasar el Domingo. Es el mundo que vivimos.
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