A lo largo de los años se habló de la desaparición de la radio, televisión, del teléfono, diarios y de los libros.
Algo de razón tuvieron quienes pronosticaban esos cambios, pero olvidaron decir que lo que ha cambiado son los soportes y no el concepto en sí.
Gracias a la tecnología no solo podemos escuchar emisoras locales sino de todo el mundo con el aplicativo Radio Garden, por citar uno.
De igual manera pasa con los diarios que apelando a las suscripciones digitales, podemos leer diarios peruanos y de todo el mundo.
Ni qué decir de la desaparición de los teléfonos en las casas e incluso para realizar llamadas de negocios. Hoy el celular medianamente sofisticado (mediana gama) es una computadora portátil y cuenta con aplicativos para realizar llamadas internacionales sin costo adicional, a través del WhatsApp y se ha convertido en el medio para que muchos escuchen música a través del Spotify o vean videos, reels, películas y otros a través del Netflix o el YouTube.
De igual forma millones de títulos están disponibles en bibliotecas digitales gratuitas o en librerías digitales como Amazon
Todo lo dicho ha sido posible gracias al avance de la ciencia y la tecnología, vía el Internet con mayor capacidad, sofisticados celulares y otros soportes.
Sin embargo, no todo son buenas noticias. En el mundo digital circulan mentiras variadas (fakes news), estamos expuestos al peligro de nuestra seguridad personal y de nuestros datos como clave, accesos a nuestras cuentas bancarias.
Las redes sociales en las que interactuamos como X, Facebook, WhatsApp y otras como el Tío Tok nos permiten conocer gente sin nunca verlas físicamente, generándose no solo beneficios sino problemas y un círculo que no sabemos finalmente si es virtuoso o no.
Estemos atentos a saber usar la tecnología y los avances a partir de ella y no depengamos de ella al punto de negarnos a una vida al aire libre o física.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario