Hace cinco años cientos de peruanos fueron al mundial de Rusia. Partieron de diversos lugares del mundo para ver el regreso de nuestra selección a un mundial, 36 años después.
Se autoproclamaron "la mejor hinchada del mundo"; cantaban a todo pulmón el Himno Nacional y "Contigo Perú" y llevaban la Bandera como cualquier bufanda. Ese era la forma de expresar "el respeto y amor a la Patria". ¿Tiempo después cuántos de esos "hinchas" salieron a defender al Perú del ataque comunista y sus cómplices?
No hace mucho nos sorprendimos cómo algunos aplaudían y rendían pleitesía a Lionel Messi aún en contra del apoyo a nuestra selección. ¿La mejor hinchada del mundo o un grupo de "turistas exhibicionistas" que van al estadio a filmar el partido en vez de alentar a los nuestros?. ¿Hinchada? La que alienta los 90 minutos en el Monumental, en Matute, en el Gallardo y en otros estadios como las sufridas barras del Boys y Municipal
Hoy "el hincha" que va al estadio sabe muy poco del equipo del que dice ser aficionado. El verdadero hincha está obligado a saber de la historia de su equipo y de sus referentes. En su momento fuimos quienes aprendimos y nos hicimos hinchas gracias a los programas deportivos radiales como Ovación, Campeonísimo, Pregón Deportivo, Golazo y otros o leyendo La Tercera, Ultima Hora o Extra.
Estamos a 72 horas y más del choque contra Venezuela y ya surgen voces que llaman a boicotear la asistencia del aficionado. Qué bueno¡ Adios a los turistas del fútbol por lo que el verdadero aficionado (que puede pagar las carísimas entradas) podrá ir al Estadio Nacional a alentar a la selección, en las buenas y también en las malas.
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