BUROCRACIA INSENSIBLE

 

Los estantes vacíos de las farmacias de los hospitales del Ministerio de Salud tienen responsables; el Ministerio de Economía y una costra de profesionales dizque de "carrera" que les cuesta aprobar las transferencias p

ara comprar medicinas que son extrema necesidad para miles de pacientes de diferentes males.

Sin embargo, esos mismos "funcionarios" son rápidos para aprobar bonificaciones por "productividad" para la alta burrocracia. Pero de qué "productividad y eficiencia" podemos hablar en un Estado incapaz de satisfacer las mínimas necesidades de una población que clama por seguridad, por inversión (=empleo) y crecimiento sano (no inflación).

Ya no hablamos de cambios cosméticos sino de cambios radicales; un nuevo gabinete de profesionales no solo de tecnócratas sino que hayan vivido (o por lo menos sepan sobre) las necesidades del ciudadano común.

¿De qué valen grandes títulos, experiencia  en organismos internacionales o ser grandes académicos si se va ocupar puestos en la alta dirección para beneficio propio o acaso ya nos olvidamos de los dos "académicos" que hicieron un estudio para "demostrar" la viabilidad de la Interoceánica Sur, obra "cumbre" de la corrupción de las constructoras brasileñas.

Entre tanto, los corruptos siguen libres, gozando del dinero mal habido y los ciudadanos seguimos sufriendo la precariedad del sistema de salud, de la escasez de recursos en la Policía para enfrentar a la delincuencia, de una educación deficitaria y de una injusta justicia.

¿Hasta cuándo? Hasta quec dejemos de ser indiferentes y con ello cómplices silentes. Hasta que dejemos de votar por delincuentes de cuello y corbata o falsos profesores y hasta que actuemos políticamente y no le dejemos la cancha libre a los corruptos e incapaces.