DURA RESPUESTA

El día de ayer la Asociación de Almirantes y Generales en situación militar de retiro (ADOGEN) dió una contundente respuesta al despropósito de la Comisión Episcopal Peruana, que como dijimos antes, no nos representa ya a la feligresía católica, mayoritaria en el Perú.

Con indignación y pena tenemos que aceptar las duras críticas de quienes defendieron la Patria, su integridad y la Democracia luchando contra el terrorismo.

Es lamentable que algunos pastores se pongan de espaldas de los perseguidos por los cómplices de los responsables del mayor baño de sangre en el Perú y no tengan la misma "agilidad" para pronunciarse contra la ideología de género y otras aberraciones.

Ello viene desde la infiltración comunista a través de la llamada "teología de la liberación" , que abonó el camino de sangre terrorista. Hoy vemos como gente como Castillo, Barreto, Cabrejos y otros no tienen empacho alguno para ser garantes y promotores de un gobierno filosenderista como el del ilegal Castillo.

Ello no invalida por cierto el papel histórico de la Iglesia Católica desde los inicios del Virreinato y luego de la República, así como todos sus aportes no solo desde el plano de la Fé.

No olvidemos tampoco el papel de muchos buenos sacerdotes y monjas que incluso dieron su vida en la lucha contra el terrorismo.

Lo de hoy es coyuntural, pero es una crisis que no podemos soslayar. Las oraciones sirven (y mucho) pero es necesario actuar contra esos malos pastores que han olvidado cuál es su papel.

Ni inacción, ni silencio cómplice (por la razón que fuera).

El quiebre entre dos Instituciones que son sostén de la Peruanidad solo conviene a los enemigos de la Fe y de la Patria 

Castillo y Cabrejos, váyanse al retiro a purgar sus culpas!