Faltan pocas semanas y se cumplirán 65 años de esclavitud y miseria en Cuba. El dictador Fidel Castro en los primeros meses hablaba de libertad y hasta de elecciones libres. Incluso encandiló a ingenuos estadounidenses que lo recibieron como un "rockstar" cuando estuvo en New York con ocasión de su participación en la Asamblea de las Naciones Unidas.
Hoy millones sobreviven en Cuba, miles han muerto asesinados por esta narcodictadura y muchos han fugado a Florida exponiendo sus vidas e incluso perdiéndola en el intento.
Sin embargo hay aún quienes hablan "maravillas" del "paraíso castrista", del cual han fugado miles pero nadie ha arriesgado la vida en una hipotética fuga de Florida a Cuba. ¿Por qué no se van a vivir a esa isla-cárcel, pero como cualquier cubano que pasa hambre y sobrevive con una "tarjeta de racionamiento"?
América "le debe" al castrismo miles de muertos debido a la única exportación "exitosa" que tienen en su haber o sea la difusión y promoción de movimientos terroristas que han traído muerte y destrucción.
Ante ello cabe preguntarse ¿por qué y cómo ha podido suceder casi 65 años de esclavitud? El hambre y la represión han logrado ello; lo que no pudieron aquí en el Perú. El ladrón Castillo solo duró 17 meses y hoy está a punto de estar ya un año purgando sus delitos.
El domingo pasado Ecuador derrotó al corrupto correísmo; este domingo 22 el libertario Milei podría estar sepultando al peronismo corrupto junto con los culpables de la destrucción de Argentina; mientras que Chile, Bolivia y Colombia se aprestan a dar diversas batallas contra regímenes no solo corruptos sino incapaces. Chile así lo entiende hoy tras 4 años del llamado "estallido social" promovido por el castrochavismo y con la complicidad de Piñera y "la derechita cobarde".
"Todo lo que sube, baja"; es la llamada Ley de la Gravedad. De igual manera no hay mal que dure para siempre; aunque en el caso de Cuba así como Venezuela y Nicaragua está durando demasiado.
Entre tanto El Salvador con el Presidente Bukele ha logrado dar la vuelta a su destino, a pesar de la estolidez y cómplicidad del progresismo y de los tontos útiles de algunos organismos internacionales y oeneges defensores de "los derechos de asesinos".
El Perú en tanto lucha por derrotar al caviaraje. La destitución de los miembros vizcarrista de la Junta Nacional de Justicia será una nueva derrota y el puntillazo para acabar con un mal que ha durado ya tiempo. La reestructuración del Sistema Electoral y la reforma del Sistema de Justicia serán los siguientes pasos para enrumbar al Perú hacia una auténtica Democracia.
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