¿Es necesario limitar la
construcción de más edificios o simplemente hacer cumplir las normas? Al
parecer habría que evaluar la pertinencia de lo segundo.
El sector construcción es uno de
los motores de la economía y frenarlo implicaría un severo golpe a ella más aún
cuando el crecimiento de ella no presenta cifras alentadoras en relación a lo
que se espera para promover el empleo, el desarrollo y por ende luchar contra
la pobreza.
Vivo en un distrito en donde se
evidencia ya graves problemas en el tránsito, falta de estacionamientos e
incluso en la dotación de agua. La presión de las conexiones domiciliarias ya
presenta problemas.
Es acertada la preocupación del
actual alcalde del distrito pero más que limitar o prohibir (sería una locura)
la construcción de nuevos edificios hay que velar por que se cumpla la
normativa y que los vecinos no se vean perjudicados en sus legítimos derechos
de seguridad y tranquilidad.
¿En vez de querer limitar el
legítimo derecho de la inversión privada, por qué no velar por el cumplimiento
de las normas de construcción? ¿Hasta cuándo los municipios no planificarán el
crecimiento de las ciudades en conjunto con las empresas prestadoras de
servicios y los ministerios del ramo?
¿Será posible una ciudad con más
inversión inmobiliaria pero con más áreas verdes y mejores servicios? ¿Hasta
cuándo las pistas adyacentes a grandes edificios estarán con pistas
completamente deterioradas? ¿Podrán los ciudadanos algún día dejar de pagar por
arbitrios en zonas donde no atienden sus justos reclamos?
Por la zona donde vivo hay
avenidas que se han transformado y presentan un panorama que no existía hará
unos 10 años. Ejemplos, las avenidas del Ejército, Brasil, Sucre, La Mar, San
Felipe, Bolívar y otras. El flujo ahora
regresa de la periferia a distritos céntricos con todos los beneficios y
problemas que ello acarrea.
¿Y el Centro Histórico? Hoy
vuelven a presentarnos un Plan de cara al 2035, ¿servirá para algo o su
redacción solo ha servido para engordar las billeteras de algunos amigos?
Hagamos de Lima una ciudad
pujante pero a la vez ordenada, amigable y amiga de la ecología. Y a propósito,
¿dónde está el alcalde Muñoz y muchos de los alcaldes distritales electos para
el periodo 2019-2022?
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