Qué lejanos los días en lo que se
intercambiaban productos (trueque) o la época cuando los fenicios eran los
reyes del comercio. Ya ni qué decir de la Ruta de la Seda que hoy los chinos
vuelven a ponerla en boca de todos con millonarias inversiones en vías de
comunicación e infraestructura.
Lejanos están los días en que la
sal era un bien importante como medio de pago por el trabajo realizado.
Con el tiempo llegaron los
primeros prestamistas y con ellos los bancos. El escepticismo respecto a su
solidez en aquellos días es comparable con el temor que hoy representan nuevas
formas de inversión en monedas que no son ni el dólar, euro o el yuan sino en
monedas digitales (criptomonedas) cuyo funcionamiento y circulación aún no es
entendida por la gran mayoría de la población y que según entendidos generan
una rentabilidad muy alta.
En los años 60s y 70s, época a la
que mi memoria llega, lo común era el pago en efectivo y el cobro de acreencias mediante
cheques. Los viajeros no llevaban dólares, menos tarjetas de crédito sino los
conocidos como “travel checks” o cheques de viajeros. Perderlos equivalía a
perder dinero en efectivo.
A inicios de los 90s aparecen en
el Perú los primeros cajeros automáticos. Recuerdo los de los bancos Latino y
Mercantil, incluso antes que el BCP. Ello pudo ser posible cuando la economía
superó los años de la hiperinflación de los 80s.
Por aquellos años era poco común
que alguien tuviera una tarjeta de crédito, salvo los que tenían las
internacionales conocidas de la época como Dinners y American Express. Luego ya
vendría Visa y se convertiría en la líder.
Recuerdo que mucha gente tenía
temor de usar el llamado “dinero plástico”, algo que hoy en día es tan común
como lo era antes pagar en efectivo.
Con el avance de la tecnología
hoy tenemos los llamados “monederos digitales” e incluso ya no es necesario
tener físicamente una tarjeta de crédito sino todo se maneja digitalmente.
Los pagos digitales, impensables hasta
hace no mucho, hoy son pan de cada día gracias a plataformas como Amazon, Ebay
o las ya no tan novísimas APPs con las que pedimos desde una hamburguesa o un
taxi. Justo ayer DIA1 en su número de aniversario publica sobre el liderazgo de
Glovo y Uber en cuanto a compras y envíos digitales así como de servicios de
taxi.
Esto ha revolucionado el mundo a
tal punto que las formas de empleo también lo han hecho. Los controles incluso
ya no podrán ser los mismos de antes en la medida que se siga popularizando el
uso de “app”.
Para muchos, el dólar sigue
siendo un “refugio de ahorro” mas para las naciones y los grandes inversores lo
es el oro, algo que sin duda alguna cambiará conforme el poder de China se siga
afianzando, quizás muy a pesar de los esfuerzos de USA y de la Administración
Trump.
El mundo se ha “achicado” no solo
por la revolución tecnológica que ha posibilitado la transformación en las
comunicaciones sino porque hoy en día es posible estar no solo informado al
instante sino que nuevas formas de ahorro, inversión y de comercio harán un
mundo cada vez diferente al que vivimos hoy.
Entre tanto, veremos la
posibilidad de entablar comunicación con uno de los expertos en nuevas formas
de ahorro e inversión a través de las señaladas “criptomonedas”, el Licenciado
Jorge Farfán, a fin de que mediante una entrevista nos pueda desentrañar ese aún misterioso mundo.
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