Era previsible que alguien saliera a esbozar alguna estúpida justificación. Y no es que el tema de "los relojes" de la Presidente Boluarte sea de máxima prioridad sino que esto podría conducir a diversos casos que pongan en evidencia que en Palacio de Gobierno sigue la misma podredumbre que no viene de ahora.
El tema central es con qué dinero compró la Presidente Boluarte los relojes que ha mostrado con total desenfado. Ese es el punto.
Sin embargo ayer la ministra de Vivienda, Construcción y Saneamiento deslizó "una salida" pensando que el Perú es un país acojudado. Dijo, "en un viaje a China compré una réplica de un reloj de lujo", entendiéndose que el término "réplica" es un eufemismo para señalar a una falsificación. ¿Con qué autoridad moral está señora podrá ser parte de un gobierno que debe combatir el delito? ¿Cómo podrá combatir las instalaciones clandestinas de agua? No olvidemos tampoco cómo le compraban suplementos vitamínicos con "la caja chica del ministerio"; algo que puso en evidencia la periodista Milagros Leiva en una entrevista en vivo a esta señora.
Sin embargo nada mueve un pelo a otroras luchadoras contra la corrupción, que hoy justifican sin vergüenza alguna un probable caso de corrupción, cuando lo mínimo que deberían hacer es exigir a la Presidente Boluarte que demuestre cuántos relojes de alta gama tiene, cuándo los compró y con qué recursos.
Si no lo hacemos pronto estaremos dando los Santos Óleos a una Democracia herida de muerte y abriendo el paso a cualquier aventurero que venga a "vendernos salidas contra la corrupción".
¿Qué esperar del Congreso de la República? Muy poco, salvo honrosas excepciones, la mayoría no quiere hacer olas pues sabe que si las hiciera pronto se irían junto con Boluarte. O sea, cuidarán sus frejolitos. Esto lo comprobaremos cuando veamos cuántos congresistas firmarán la admisión del pedido de vacancia de Boluarte, oportunidad que tendremos para que la Presidente muestre sus descargos.
Otros "institucionalistas" nos dicen que apostemos por el debido proceso como si no se hubiesen dado cuenta que la justicia sólo funciona para los que delinquen. Toledo dejó de ser presidente hace 18 años y aún no está condenado y la ratera confesa Villarán "se mata de risa" de nosotros mientras se baña en su proletaria piscina.
No faltan tampoco quienes buscan cualquier pretexto para justificar su apoyo a la cuestionada Presidente, incluso dicen que "ellos no tiran piedras a los pecadores" (otro eufemismo para señalar a los delincuentes) o dicen también que "la corrupcion no se sana con castigos y cárceles"; o sea ¿Toledo libertad?
Nuestra Democracia está en Unidad de Cuidados Intensivos mientras ingenuos, cómplices y piquichones traman coartadas para salvar el cuello de la María Antonieta del siglo XXI y no se dan cuenta que peruanos en extrema pobreza, gente desahuciada por falta de medicinas, anémicos sin esperanza y otros conciudadanos esperan ver algún día que los gobiernos les permitan tener mejores oportunidades.
Expropiemos aquella frase, "seamos realistas, pídanos lo imposible" y exijamos JUSTICIA DE VERDAD, no como la pedía la Presidente Boluarte en aquel "gabinete descentralizado" en Huancayo cuando el chorocomunista saqueada el Perú y ella era su ministra.
Finalmente y en respuesta a un dilecto amigo que me reclama que deje de comentar temas banales (sic) como los relojes de la Presidente, en vez de ocuparme de la gente que no tiene agua: Javier: esa gente no tiene agua "gracias" a corruptos, incapaces y sus cómplices. El día que los derrotemos, habrá no solo agua para los que no la tienen, sino sobre todo seremos un país digno y con futuro.
Que este caso de "los relojitos" de la Presidente Boluarte sirva para que el Ministerio Público mida a todos por igual y todos incluye a los caviares y sus tótems que aún no explican cómo se las ingeniaron para comprar departamentos y autos de lujo (Bazán y Pérez) o para pagar de estudios de su hija en USA (la pareja presidencial (Humala-Heredia).
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