sábado, 29 de junio de 2024

CINCO AÑOS Y MEDIO

 



Casi hilarante termina siendo la exhortación que hace alguien que en teoría estuvo en contra del fraude en el año 2021 y hoy que se vuelve a poner en tapete denuncias sobre éste sostiene que "está consumado" ( o sea a fregarnos nomás) y que "debe investigarse y sancionarse a la mafia electoral; sin afectar la precaria estabilidad del país, su reactivación económica y lucha contra la pobreza". O sea que se siga "meciendo" a la ciudadanía (pues es eso lo que implica "investigar") y que un gobierno ilegal e ilegítimo en su origen siga destruyendo el país.

Aquí no importa la verdad ni la defensa del verdadero Estado de Derecho. A gente como el que expresa ese "llamado" lo que le importa son sus intereses o quizás algún puesto de trabajo en el Estado. Ellos son los que desde un inicio se les bautizó como "los dinistas".

Cómo vemos no se hace un llamado a castigar no solo a los que avalaron el fraude sino sobre todo a los autores intelectuales y a quienes fueron favorecidos por aquel, vale decir a la quien entonces era candidata a la vicepresidencia y socia del senderista Castillo y hoy estaría usurpando la Presidencia de la República.

Pero para tapar todo y que todo siga igual no hay mejor forma que "pedir que se investigue". Para que esto tuviera algún sentido todas las autoridades electorales sindicadas y que aún ocupan un puesto deberían ser separadas de sus cargos y retomar con las exigencias que en su momento se hizo como por ejemplo que se muestre la documentación electoral referente a la identificación de los electores (firmas y huellas digitales) y que se analice de verdad las decenas de actas electorales observadas.

Sin embargo esto que parece ser una obligación moral no preocupa a la entonces candidata Keiko Fujimori, quien en su momento hizo muy poco para oponerse y hoy menos que está ad portas el inicio de un juicio contra ella.

Es cierto que faltan dos años para el cambio de gobierno y destituir a Boluarte podría traer una serie de problemas pero no hacerlo significaría avalar un fraude y que nadie pague por ello.

Mañana cumplimos cinco años y medio de publicar en EL ORACULO DE DON TRIBI en cuyo artículo inaugural hacíamos un llamado a los hombres justos que aún había en el Congreso para que enfrenten el vizcarrismo cuyas acciones y despropósitos ya avizoraba un futuro nada esperanzador. Ese mismo llamado lo volvemos hacer a los que pocos que aún existen en ese Poder del Estado.

Pretextos para no actuar hay muchos pero hay razones valederas para defender principios y sobre todo uno, defender la Patria ante la posibilidad de "ser un burdel o un estado fallido".

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