ANOCHE TUVE UN SUEÑO

 

Martin Luther King en un mensaje dijo que "tenía un sueño" (un deseo) de cara a un Estados Unidos aún racista. Este sueño se cumplió.

Mi deseo (no una visión futurista) es que el Perú sea  gobernado por alguien capaz y honesto. Bastaría por ahora que la Presidente Boluarte diera un golpe de timón y nombrará como Premier a Lourdes Flores Nsno y a un ministro de Economía de peso (no necesariamente físico) como Luis Carranza que anunciara el fin de la recesión y la inversión de 60 mil millones de dólares en el sector minero.

El Perú necesita un Gabinete de Ancha Base que incluya al actual Canciller Javier González-Olaechea y al Ministro de Comercio Exterior y Turismo Juan Carlos Mattews. ¿Alguno más de los actuales? No creo.

A la par de ello soñé que el Jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas General Ojeda anunciaba la Pacificación del VRAEM y el General PNP Arriola presentaba capturados a los últimos cabecillas de las organizaciones criminales que asolaban el Perú.

Soñé también que un grupo de técnicos probos y conocedores encabezados por Francisco Dumler anunciaban el inicio de obras de infraestructura, agua y saneamiento en todo el Perú.

Escuchaba en un noticiero el inicio de una verdadera Reforma del Sistema de Justicia y la erradicación del caviaraje, culpable de tener el actual.

Veía en mis sueños la inauguración de un gran monumento en honor a los Héroes de la Pacificación en el lugar donde ocupara el llamado "ojo que llora" y momentos después el General EP (r) José Williams inauguraba el verdadero Lugar de la Memoria, donde antes se promovía el odio y la mentira.

Horas más tarde aparecía un Decreto Supremo donde se nombraba a diversos técnicos para llevar a cabo la gran Reforma del Estado. Escuché los nombres de Yamada, Cortez, Vásquez, Valdivia y otros. Ya era hora que se contará con ellos. 

Desperté y fue un sueño que espero que sea una pronta realidad. El Perú no puede seguir en la inmovilidad, las miasmas y la hoguera. Es hora de la verdadera "gran transformación", de un real "gobierno de lujo".

Si Boluarte y el Congreso no pueden cambiar, ya será la hora del "paso al costado" y de una salida diferente. No podemos esperar hasta al 2026 ni menos que asesinos de policías, garantes y promotores del ladrón Castillo y golpistas genocidas y corruptos intenten siquiera tomar el poder a punta de floro y humo.