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Ayer fue un día de noticias contradictorias e incluso inexplicables.

Se supo por boca del Ministro de Justicia que la Presidente Boluarte pedirá a la Fiscalía archivar la investigación a las que la agredieron. Una verdadera estupidez. Con ello convalida cualquier atentado terrorista en su contra que pueda ocurrir en el futuro y es un grave reconocimiento al incumplimiento de la ley y a las mínimas normas de convivencia pacífica. ¿Qué podremos exigir luego si esto ocurriera, justo que desde Puno otro grupo subversivo pretende impedir que la Presidente viaje a esa región?

Pero como -lamentablemente- vivimos en un país donde donde no hay respeto a la ley, estabilidad y seguridad, ayer un desconocido grupúsculo anunció un paro indefinido en el distrito de Machu Picchu justo en el día que se lanzaba una atractiva campaña de marketing  para atraer turismo receptivo. ¿Cuántos perjudicados habrá y cuántos de ellos regresarán a sus países de origen hablando pestes de nuestra Patria? Para algunos que creen que nuestro país no tiene competencia les decimos que están equivocados. Cuando un potencial viajero planifica sus vacaciones mira más de 200 países posibles y elige entre otros a un país como el nuestro pero seguro y que ofrece garantías.

Como ayer decíamos, esas acciones subversivas causan graves pérdidas no sólo al sector Turismo sino a todo el país. ¿De qué valen campañas promocionales  si nos disparamos a los pies so pretexto que la empresa privada que comercializa las entradas a la ciudadela de Machu Picchu "cobra una comisión". ¿Qué creen esta sarta de antiperuanos? ¿Qué si las entradas son vendidas por un organismo regional o nacional no cuesta hacerlo? Además estemos atentos a una denuncia publicada ayer por el diario Expreso justo sobre un presunto robo de recursos producto de la venta de boletos de ingreso a esa ciudadela.

Esto que relatamos parecen salido de un noticiero de Macondo. Ojalá que solo sean amagos que no trasciendan.

La subversión busca no sólo destruir las bases de nuestro Perú sino sus principales actividades; la minería, la agroindustria y el turismo.

Despierte señora Boluarte. Aún está a tiempo de no ser recordada como la sexta ex Presidente en ocho años.