jueves, 16 de mayo de 2024

203 AÑOS

 


Lo que vivimos estos último ocho años no es nuevo ni una crisis que no conocemos.

Desde el nacimiento de la República hubo el enfrentamiento entre San Martín  y Bolívar que terminó con la ida del primero y el triunfo de un proyecto antiperuano.

Los primeros treinta años fueron de inestabilidad al punto que hubo en algún momento hasta tres "presidentes" a la vez. Tras ello hubo un momento de estabilidad con Castilla e incluso de prosperidad  con el guano y el festín del Contrato de Dreyfus.

Sin embargo en un marco de desunión y desgobierno se produjo la dolorosa derrota y pérdida de territorio como producto de la infausta guerra con Chile.

El Perú tardó en restañar heridas producidas por dicha guerra y el enfrentamiento entre. Cáceres y Piérola. Pese a ello volvimos a renacer con el oncenio de Leguía, tras cuya caída vinieron años de odio, enfrentamientos y muerte que tuvieron fin, paradójicamente, con otro golpe de estado y años de bonanza con el gran Manuel A. Odría y la gestión de Pedro Beltrán en el gobierno de Prado. 

Cómo ya reseñamos anteriormente los anti impidieron el triunfo del APRA en las  elecciones de 1962. Un golpe militar lo impidió y otro permitió el triunfo de Belaunde que un año antes había apoyando el golpe de Pérez Godoy.

Han pasado 61 años y hemos sufrido el desgobierno de Belaunde que originó el golpe militar de corte nasserista de Velasco Alvarado que terminó de destruir el Perú. Afortunadamente otro golpe, está vez de Morales Bermúdez impidió que el Perú fuera otra Cuba. El Perú volvió a la senda democrática con la Asamblea Constituyente de 1978 y las elecciones de 1980. Sin embargo no vino ni la prosperidad, la unión ni la paz. 1980 fue el inicio de los años de muerte y destrucción terrorista, de la peor crisis social y económica. Belaunde sembró y García cosechó la peor hiperinflación de nuestra historia.

En 1990, un gobierno fuerte y con decisión logró resucitar a un Perú que desfallecía. Con un cierre del Congreso y una Asamblea Constituyente se sentaron las bases económicas que permiten que el Perú sobreviva pese a la incapacidad y corrupción que sucedieron tras la caída del tercer gobierno de Fujimori, con un oasis de prosperidad en el segundo gobierno de García (2006-2011).

Han pasado 24 años de supuesta vida democrática que  han traído la perniciosa influencia caviar; el gobierno del corrupto Toledo; un "andahuaylazo"; el mayor robo que ha sufrido el Perú (Lava Jato); elgibierno conyugal de Humala-Nadine; la renuncia de PPK; el golpe de Vizcarra; el golpe de masas caviar contra Merino de Lama; un gobierno transitorio de Sagasti, un caviar que nunca ganó una elección; un fraude que llevó a Palacio del filodsenderista Castillo, su vacancia tras un golpe de estado fallido y la sucesión de una hoy investigada por corrupción, que enfrentó un violento intento de destitución y sufre hoy una ofensiva caviar que busca su renuncia.

Lo paradójico es que quiénes buscan su salida son quienes la eligieron con sus votos y quienes la defienden son los partidos de derecha con curules congresales, que la sostienen en vez de buscar una salida propia que beneficie al Perú.

Son 203 años de historia con poco de éxito y mucho que ha hecho casi zozobrar al barco llamado Perú.


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