¿AUMENTO?

 

En los años 80's proliferaban las empresas del Estado en donde todos los años se negociaba pliegos de reclamos con no sólo aumentos de sueldos sino inimaginables y estrambóticas exigencias. No importaba si la empresa estaba en condiciones de asumir mayores costos o no, como tampoco si los aumentos tenían un correlato con el aumento de productividad o logros de objetivos. Los sindicatos siempre apelaban a los llamados "derechos laborales" pero nunca se hablaba de deberes y su cumplimiento.

Algo que parecía superado ha vuelto con fuerza en el Congreso de la República, para indignación de la ciudadanía. Ya no son solo los llamados bonos de "productividad" (sic) sino aumentos, algo que no lo merecen la gran mayoría de congresistas. Pocos son los que dan la talla y son dignos de llamarse "Padres de la Patria".

Demás estaría referirse a mochasueldos y a otros indignos de ocupar una curul en la que alguna vez estuvo uno de los peruanos más ilustres  el Almirante Miguel Grau, diputado por Paita.

Justo hoy, día en que millones "la sudan" de sol a sol, quienes con todo derecho celebran el Día del Trabajo tenemos el sinsabor de comentar un aumento que será un baldón para una institución republicana tan venida a menos y que ha opinión de expertos en el tema como el ex Oficial Mayor del Congreso José Cevasco debe ser reformada para dotarle de "más músculo y menos grasa".

¿Será posible esto? ¿Podrá en algún momento haber una verdadera Comisión de Ética? ¿Cómo es posible que sigan siendo congresistas gente como Alcaraz, Doroteo, Espinoza, Amuruz y tanta gente que con sus actuaciones dan vergüenza y producen arcadas a millones de peruanos. 

Este Congreso sobrevive porque existe un pacto de impunidad con un gobierno incapaz y con notorios visos de corrupción. Y pensar que hay quienes avalan y justifican ese pacto que no es por el bien del país sino para su desgracia. Uno depende del otro para sobrevivir pero el futuro del Perú depende de que se vayan cuanto  antes.

Este "aumento" es una vergüenza que deber ser anulado hoy mismo. ¡Basta ya¡ Es hora que propuestas como la esbozada por el Congresista Rospigliosi, el lunes pasado en su columna semanal en el diario Expreso, sea llevada a la práctica. Basta que "las masas" sigan decidiendo el destino de nuestro país.