ALIANZA PARA ¿EL PROGRESO?

 

En 1961 el presidente estadounidense John Kennedy anunció la creación de un programa de ayuda que buscará mejorar las condiciones de vida de los habitantes de países latinoamericanos. A este programa le denominó Alianza para el Progreso y en su real dimensión buscaba prevenir el avance del comunismo tras el triunfo del castrismo en Cuba.

Este anuncio se concretó en agosto de ese año en Punta del Este, Uruguay; acuerdo suscrito por todos los países latinoamericanos, con excepción de Cuba por obvias razones.

Años más tardes un empresario del sector educación fundó un "partido político" al que denominó Alianza para el Progreso (APP). No sería su primera ni mejor copia.

Este empresario César Acuña tuvo la sagacidad de convertir la necesidad de miles de estudiantes en una oportunidad para amasar una apreciable fortuna a través de una universidad de poca exigencia y económicas pensiones.

A lo largo de su vida Acuña supo moverse. Su universidad fundada en Trujillo fue expandida a través de sucursales en todo el país y su masa de estudiantes y círculos cercanos se convirtieron en potenciales electores de su partido. Así fue como arrebató Trujillo y gran parte del norte al APRA ganando gobiernos locales y regionales.

Hoy mismo Acuña es gobernadores regional de La Libertad sin mayor brillo ni logros.

En el 2021 dió su apoyo (de nulo efecto) a Keiko Fujimori en la segunda vuelta y ni bien se proclamó el fraude, fue a saludar y darle su apoyo al filosenderista, el cual se concretó sin mayor vergüenza, demostrando que la coherencia ni fidelidad son su fuerte. Incluso ordenó votar contra las primeras vacancías de Castillo hasta que le soltó la mano el 7 de diciembre del 2022.

No obstante y siguiendo la teoría de "la escopeta de dos cañones", sus congresistas forman parte del llamado "bloque Democrático" pero son dinistas a morir, recibiendo por ello cuotas ministeriales. Sin embargo dos de sus electos congresistas se fueron muy pronto (lo mejorcito), el General Chiabra y la ex Fiscal Echaiz y de los que quedaron varios tienen sus "anticuchos sin pagar"

Hoy APP vuelve a imponer sus caprichos. En este periodo 2021-2024,  de los cuatro Presidentes del Congreso, dos fueron de APP (Camones y Soto) y esta vez tiene asegurada su elección un cuestionadisimo  Salhuana, al que le han salido defensores de diferentes tiendas políticas, entre cuyas razones incluso arguyen que la Presidencia del Congreso "no tiene mayor poder de decisión". Si fuera así, ¿por qué es pretendida con loco entusiasmo?

Lo cierto que hoy el Congreso seguirá degradándose. La ciudadanía lo ve con mayor desprecio y ello evidentemente es un daño terrible que le hace a la Democracia.

Finalmente las preguntas que surgen de este escenario son varias; pero quedemos en dos. Una, ¿por qué el bloque "democrático" acepta ir con alguien como Salhuana? Muy simple. Saben muy bien que si no le aceptan sus caprichos a Acuña, éste ordena a "sus congresistas" que negocien con los rojos. Eso no tiene dudas, sino vean la foto de Acuña con Castillo. 

La otra pregunta no tiene una respuesta tan clara. ,¿Por qué Acuña impone a alguien como Salhuana? ¿No hay otro sin tanta máculas? ¿Será que es "el menos pésimo"? ¿O será que no le importa nada exponer a la Democracia al debacle total?

Lo cierto que para "digerir" todo esto necesitamos un Gravol y un digestivo triple acción.

Pobre Perú; esta es la "estabilidad e institucionalidad" democráticas que pretenden que "traguemos" cuál sapo del Titicaca (ultu)?