JDC: DESMITIFICANDO AL COMUNISTA

 

JDC, así lo llamaban los medios amigos cuando se referían al comunista Javier Diez Canseco Cisneros, fallecido hace 7 años en medio de denuncias como las que él acostumbrada lanzar, destruyendo honras. Denuncia que fue parada por un amparo judicial, al que muchos de sus acusados no tuvieron la misma "suerte" de acceder. Se creía "el Marat peruano".

Hoy nos enteramos indignados cómo el Ministerio de "cultura" sigue financiando propaganda que busca ensalzar a asesinos como Heraud y Hugo Blanco y ahora a este comunista que durante su vida política no hizo nada constructivo por el Perú. La película se llama Rojo Profundo y ha merecido "un jugoso premio" con el que permitirá a la productora terminar el film documental, cuya directora Maga Zevallos dice que trata de un "personaje muy importante para la historia política del  Perú".

A continuación veremos lo qué fue realmente.

Perteneció a los que la izquierda "jurel" llamaban despectivamente "izquierda miraflorina" y le enrostraban cada vez que "debatían" su "extracción de clase", debido a su origen familiar. Su padre fue gerente de un banco del Imperio Prado y ello le permitió vivir su juventud con la holgura que no tuvieron los que él decía representar. Como él otros de su misma "cuna de oro" también militaron en la izquierda petardista, desde meros "megáfonos" de sus fechorías hasta mano ejecutOras de los crímenes más abyectos. Recordemos nomás quién fue Maritza Garrido Lecca.

A temprana edad tuvo la desgracia de contraer la polio lo que le dejó secuelas físicas, las que algunos adversarios se las señalaban con dureza y "mala leche".

Su trayectoria escolar la hizo en escuelas católicas pruvadas de prestigio y luego estuvo dos años (1967-1968) en la Universidad de San Marcos donde sería inoculado por el virus rojo. Pero como buen comunista, no era congruente con sus posiciones y prefirió la Universidad Católica donde empezó su carrera pública; primero como dirigente de Ciencias Sociales (1970) y luego de la Federación de Estudiantes de la Católica (FEPUC) en 1971. Tenía ya 23 años. Sus "biógrafos" dicen que estudió Sociología en la Católica por largos siete años aunque no consignan si se graduó o quizás fue uno de esos "estudiantes eternos" dedicados a la politiquería. Lo que sí está comprobado que tras promover un paro de "estudiantes y trabajadores" fue expulsado de la Católica en 1971. En aquellos años ya militaba en uno de las vertientes de Vanguardia Revolucionaria (era "un verraco" para sus adversarios de otras de las facciones que constituían esa sopa de letras rojas que era la izquierda de aquellos años).

Ya entonces se había ido a vivir a una casa de una agrupación de curas infiltrados, que promovían la Teología de la Liberación. Tan falsos como "moneda de tres soles" y más peligrosos que el más vil delinciente. Sino recordemos a la monja infiltrada Nelly Evans y por supuesto a sacerdotes y prelados que le hacían el juego al terrorismo, por ejemplo cuando salieron en defensa del senderista Jimmy Wesjoe y de tantos asesinos, desde la propia Comisión Episcopal. 

La cercanía de Diez Canseco con este grupo duró hasta que tuvo 30 años cuando salió electo Constituyente. Hasta entonces enía casa y comida para mantenerse sn tener que trabajar como lo tenían que hacer "los pobres y oprimidos".A partir de entonces empezaría a vivir del Estado como parlamentario y cuando no estuvo en el Congreso, de la cooperación internacional y/o de "solidaridad" de organismos cómplices del comunismo que desde el Mundo Libre fomentan el comunismo en el mundo.

Tras un intento por buscar relacionarse con los mineros de La Oroya y tras una intensa campaña de destabilizar al gobierno militar (Segunda Fase) fue deportado a Argentina y de ahí partió a Francia. No sé si escogiera su destino o no, pero lo cierto que ningún comunista se exiliaba en Corea del Norte, Albania o el "paraíso castrista" Cuba. Tontos, evidentemente no eran. Quizás ahí hubiera tenido que ganarse su racionamiento de frejoles y por cierto haber trabajado alguna vez en su vida.

Pero como buen comunista.  a pesar de no creer en la democracia participa de las elecciones  y de "sus bondades". Es así que participa en la Asamblea Constituyente de 1978-1979 formando parte de la Unidad Democrática Popular (UDP), conglomerado de siglas entre ellas VR, MIR, PCR y otras). Se denominaban la "Nueva Izquierda" ("Sin calco ni copia", como decían ser).

Salió electo en uno de los mayores éxitos del comunismo latinoamericano, formando parte de los 34 constituyentes que formaron un bloque de "buenos sino para organizar algaradas y revueltas", tal como sostuvo Luis Pásara en un balance de la participación de la izquierda en la Constituyente, en el cual se sostiene y comprueba que no plantearon ninguna iniciativa constitucional y menos, incluso, suscribieron la Carta Magna. A pesar de ello, años más tarde promovían su vigencia frente a la Constitución de 1993, clave para la Reconstrucción del Perú. Los sinsentidos de los comunistas.

Diez Canseco a contraparte de otros constituyentes comunistas siempre lucía costosas casaca de cuero en vez de raídas prendas que lucían otros. Fue el inicio de los 21 años que vivió del Perú promoviendo su destrucción.

Tras el éxito de 1978, la izquierda intenta ir en un frente al que denominan ARI  ("sí" en quechua), siglas de Alianza Revolucionaria de Izquierda llevando a Alfonso Barrantes, el llamado "Tío Frejolito", como cabeza pero las ambiciones y cubileteos por cupos en las lista de senadores y diputados y la labor de zapa del troskismo (representado por Hugo Blanco) no permitió la unión y quizás mejores resultados. Diez Canseco volvió a postular en la UDP  y fue electo diputado por Lima. Los cinco años de su mandato los destinó para "investigar" al gobierno militar (sin resultado alguno, como lo fue toda su vida) y a defender las acciones terroristas primero de sendero luminoso y luego del movimiento revolucionario Túpac Amaru. Diez Canseco, como buen comunista nunca abjuró del uso de la violencia y sus discrepancias eran del orden táctico y de momentos.

Luego de ARI y la derrota estrepitosa derrota de la izquierda en las elecciones de 1980, la izquiera se une (setiembre 1980) en un frente llamado Izquierda Unida (IU) que postula por primera vez a la alcaldía de Lima a Alfonso Barrantes, quien pierde pero en  1983 fue el año de triunfo de la izquierda con la candidatura de Barrantes como alcalde de Lima. Este triunfo en Lima  así como en diversas ciudades les permitió acceder a una "cuota de poder"  a través de alcaldes y concejales y con ello beneficiarse de los presupuestos públicos. Cabe señalar que IU fue "un pegado con babas" de diversas tendencias entre ellas la UDP de Diez Cansec, los moscovitas del Partido Comunista, los pekineses de Patria Roja, los aún velasquistas del Partido Socialista Revolucionario (PSR), el FOCEP (sin los troskistas), el FRENATRACA de los caciques puneños Cáceres Velásquez y otras facciones menores. Los troskistas con Hugo Blanco a la cabeza señalarían a IU y la combatirían con el lema "sin patrones ni generales", en alusión a la presencia de empresarios "de izquierda" como Gustavo Mohme (Acción Política Socialista) y a los generales primofásicos del PSR.

En 1984 Diez Canseco aglutina a la UDP con otros sectores de la izquierda y funda el Partido Unificado Mariateguista (PUM) que busca hegemonizar la IU. Ya entonces buscaban no llamarse comunistas sino "mariateguistas" (seguidores de José Carlos Mariátegui) y ser una tercera vía entre los pekineses (Patria Roja) y moscovitas (Partido Comunista Peruano -Unidad), logrando ser uno de los partidos con mayor presencia en la izquierda. Ya por esos años Diez Canseco y el PUM formaron un "brazo armado" clandestino y evaluaban pasar a la "lucha armada".

En 1985 la unidad de izquierda (Izquierda Unida IU) participan en las elecciones generales con  Barrantes como candidato  pero pierden las elecciones ante Alan García. Diez Canseco fue electo de nuevo, esta vez como Senador. 

Fueron los años del baño de sangre que llevó a cabo el terrorismo y Diez Canseco no tuvo empacho alguno de salir en cuanto diario y revista de Izquierda existiera para  apoyar a la subversión denunciando "masacres", "atentados a los derechos humanos" y atacar a las fuerzas del orden tildándolas de "genocidas". La misma prensa amiga le dió cobertura para que tuviera su "caja de resonancia" (La República).

Diez Canseco en aquellos años llegó a consolidar su liderazgo en la izquierda "legal" (como les llamaban los subversivos) y a su vez unir lazos con la llamada "revolucionaria" (léase terrorista). Pero su liderazgo no siempre fue aceptado. Dentro del PUM y fuera de ese partido se le acusó de sectario y hubo rupturas. Primero se separaron Murrugarra con un grupo importante de líderes provincianos (1987); luego en setiembre de 1988 Carlos Tapia y unos cuantos más se van y fundan el  Movimiento Socialista Peruano (MSP) y luego otra en el mismo 1988  en la cual una fracción más importante liderada por Agustín Haya  junto con Michel Azcueta, Julio Castro, Oscar Ugarte y Santiago Pedraglio se fueron del PUM y formaron la Cordinadora Nacional Mariateguista  y luego el  PMR (Partido Mariateguista Revolucionario). En aquellos años también hubo un debate ideológico, no entre demócratas y no demócratas" sino entre variantes y matices de comuni. Los más radicales que ya pedian "acción" fueron llamados "libios" (entre ellos Diez Canseco) y los "zorros" (que consideraban que no era el momento de tomar las armas y eran liderados por Sinesio López, entre otros. El debate se dió usando dos medios. Los "libios" usaban el semanario Amauta y los "zorros" la revista El Zorro de Abajo". 

En eso años también hubo la ruptura entre los "tibios y rosaditos" como Barrantes, Ames, Murrugarra  y otros y los "duros" (abiertamente proterroristas) quienes usaron a Henry Pease como candidato presidencial en 1990. Por esos años fueron de deslindes y rupturas. Un intento de subvertir el orden "fuera de los cánones" que daba la Democracia fue la Asamblea Nacional Popular (ANP) en 1987 y consecuencia de las luchas intestinas fue la ruptura del Partido Comunista Peruano, cuya Juventud se pronunció en un Congreso pidiendo "acción" (léase tomar las armas) así mismo dentro del Congreso se forma el Bloque Popular, Revolucionario (Yehuede Simon y otros) con ramificaciones con el MRTA y también con Sendero Luminoso a través de algunos diputados de IU. El punto de quiebre fue el Congreso de IU en Huampaní en 1989 en el cual se fractura la izquierda por enésima vez con Diez Canseco como uno de los responsables.

 En las elecciones de 1990 Diez Canseco volvió a ser electo senador  por IU y tras el cierre del Congreso el 5 de abril de 1992 estuvo "corrido"  y muy golpeado tras la derrota militar de sus "compañeros". No postuló en el Congreso Constituyente Democrático (CCD) de 1993 pero fue un activo enemigo del régimen de Fujimori .

Cuatro años después, volvió a ser enfocado por los reflectores cuando fue uno de "los rehenes" en la toma de la residencia del embajador de Japón (1996). Sospechósamente fue liberado a las pocas horas y salió "exigiendo una salida política". Un rehén cuyo nombre no recuerdo declaró después que el líder de ese comando terrorista Cerpa Cartolini se ufanaba de haber tenido topos el día de la toma, algo que llama la atención y se podría relacionar con la postura que adoptó el comunista Diez Canseco tras su "liberación" y los días posteriores hasta el 27 de abril de 1997 en el que el Comando Chavín de Huántar liberó la residencia.Tiempo después con las versiones del japonés Ogura, Diez Canseco sería uno de los acusadores de los Héroes de la Democracia de la mano con APRODEH, oenege derechohumanista que él mismo fundó (1983) como apéndice de Vanguardia Revolucionaria, una organización política comunista que jefaturaba.

En 1996 el PUM se autodisuelve y luego el propio Diez Canseco funda el Partido Democrático Descentralista.

A la caída del régimen de Fujimori y ante el desprestigio del comunismo, Diez Canseco prefirió ser parte del cascarón que quedaba de Unión por el Perú que en un momento liderara Javier Pérez de Cuéllar. Fue electo congresista en las elecciones del 2001  y a su "agenda investigadora" se sumó a cuanto nuevo tema surgiera entre ellos "la discapacidad". Sobre ello recuerdo una anécdota cuando una funcionaria pública desenmascararía su oportunismo. Primero fue opuesto a la Educación  Inclusiva priorizando las Escuelas Especiales y luego se volvería "fan inclusivo" pues por ahí se encaminaba la  historia. Por supuesto que sus posiciones no eran principistas pues esa "defensa" lo vincularía a las oeneges y muchos miles de razones que provenían de la cooperación internacional; nueva fuente de ingresos de muchos.

Después de su paso por UPP funda el Partido Socialista dizque porque abjuraba del "comunismo". Candidateó a la presidencia en el 2006 y sacó 0.5 % de votos (leyó bien, medio por ciento).. En el 2011 se subió al carró del ollantanadismo (con la luz verde de Nadine Heredia, por cierto) y fue electo congresista. A casi un año de su mandato abandonó el barco junto con Rosa Mavila y Veronika Mendoza) . Al tiempo fue comprometido en un escándalo de conflicto de intereses y suspendido en sus funciones. El negaría tal acusación pero la mano que siempre levantó contra otros ya le había caído encima.

Al poco tiempo (febrero 2013) se supo que sufría el terrible cáncer del cual no pudo sobreponerse. Falleció tres meses después el 4 de mayo del 2013.  

Diez Canseco tuvo una virtud que no sirvió para hacer el bien, la perseverancia. Acusó y difamó sin control alguno amparado en sus 21 años de parlamentario.En sus más de 40 años de vida política no construyó nada positivo para el Perú. Avaló el baño de sangre terroriston con su silencio y también con su asolapado accionar  e hizo lo indecible para que el Perú no se desarrollase, buscando seguro crear las condiciones objetivas y subjetivas para imponer el comunismo en el Perú por la única forma que sabía, a través de "la revolución" lo que confirmaba cuando vivaba ("PUM, PUM, POR LA REVOLUCION) simulando el explotar de la dinamita y anfo asesinos.

Hoy que se pretende promover la imagen del comunista Diez Canseco, con dinero de todos y en medio de tanta necesidad; es imperativo recordar quién fue este político, que en sus últimos años impulsó el Foro de Sao Paulo, brazo político de la corrupción jefaturada por el brasileño Lula y conspicuo miembro de esa "internacional de la corrupción, de la miseria, muerte y aberraciones".

Salgamos al frente de ese despilfarro que se pretende en el Ministerio de Cultura. Basta de mentiras¡