domingo, 6 de enero de 2019

FELIZ PASCUA DE REYES


El día de ayer fue especial, como cada año viene sucediendo. Los primeros sábados de enero los antiguos aspirantes de la Casa de Formación Salesiana Pablo Albera nos reunimos para participar en una misa de Acción de Gracias y para, por cierto, también confraternizar.

Tuve la gran alegría de reencontrarme en forma especial con tres personas. Con mi amigo de mi primera juventud, Jorge Farfán a quien no veía personalmente desde hace 45 años, con Salvador Rofes con quien trabajamos en el Banco Industrial hasta 1991 y por cierto con el Padre Alberto Rodríguez cuyo ministerio es uno de los frutos que sembraron los Salesianos.
Gran alegría volver a ver a Jorge Cobo, Carlos Bernabé, Pepe Bazán, vía la magia de la tecnología –desde México- con Carlos Vivar, Manuel Tovar, Marino Dávila, Pancho Dumler, Francisco Cahuana, los hermanos Moloche, Jorge Durand, Ciro Quispe y otros más. Fuimos casi 40 los que participamos este año.

La misa la concelebraron los padres Alberto Rodríguez y Pedro Cobeñas quienes tuvieron el acierto de hacernos participar en la Homilía, circunstancia que fue propicia para que participara resaltando el papel de que tenemos los católicos –más aún quienes tuvimos la dicha de ser parte más cercana de la Iglesia como fue nuestros casos- en ser defensores intransigentes de valores, de  la Fe, la Vida, el Orden Natural y la Familia.

Hoy en día, lamentablemente la Iglesia Católica pasa por una serie de problemas, dudas y en algunas circunstancias hasta algunas desviaciones de ciertos pastores quienes confunden el papel de la Iglesia y avalan ciertas circunstancias e incluso cierta agenda contraria a los designios de Dios. Sin embargo, ello es coyuntural y nuestra Iglesia con más de dos milenios de vida se alza como baluarte de una sociedad también en crisis, lo que se manifiesta incluso en la drástica disminución de vocaciones sacerdotales en mundo sensualizado que hace que algunos jóvenes hayan dejado de mirar a Dios. Sin embargo me alegro sobremanera cuando jóvenes cómo Samuel Soldevilla persiste en su fe militante o como amigos de LaAbeja.pe y el Maestro Sergio Tapia dan testimonio de vida de su acerada Fe.

“Dios aprieta pero no ahorca” dice un antiguo dicho y esto tiene que ver también con la marcha de nuestra Iglesia. Hay problemas pero la Iglesia fundada por Dios Todopoderoso saldrá adelante muy a pesar de los vanos intentos de sus enemigos. No me cabe duda y lo reafirmamos cuando rezamos el Credo.

Con la bendición recibida ayer previa a la Efinanía que celebramos hoy, les deseo a todas mis amistades que me leen…FELIZ PASCUA¡¡

2 comentarios:

  1. Muy de acuerdo en su escrito. Pasamos malos momentos. Pero nuestra Fe, sigue intact. Alabado sea Dios

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  2. Me siento más que honrado de contar con una amistad tan edificante como la suya don Tribi.

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