EL TÉ TORO

En los años 70s la prensa parametrada y los creativos al servicio del gobierno publicitaban el Té Toro al que le sindicaban tener "proteínas y vitaminas". Era la época de la crisis que nació con el Velascato. Esta prensa decía que el Té Toro era "el nuevo desayuno peruano".
Otros con más descaro decían que "la carne de las ratas era altamente proteica". Qué desvergüenza.

Muchos niños y jóvenes fueron parte de esa "generación Té Toro" y un poco después se "alimentaron" con la Nicovita, alimento balanceado para cerdos y pollos.

La prensa ayayera siempre fue así. Siguieron al pie de la letra lo que le ordenaba los mandamases de turno y por supuesto hincaban la rodilla y la cerviz para recibir mendrugos.

Sin embargo, detrás de estas campañas siempre hubo "cerebros" que escribían los libretos. En aquellos años uno de ellos fue un psiquiatra asesino que puso sus conocimientos para fabricar "las cortinas de humo".

Con el tiempo y el avance de las ciencias sociales y el marketing, hubo un trabajo conjunto entre las encuestas y el manejo de las masas. Si antes los pagos eran asolapados, hoy se disfrazan de publicidad estatal.

Sin embargo, la pregunta que nos hacemos es si el direccionamiento del resultado de las encuestas da como consecuencia la formación de opinión o si ésta más bien se muestra en los resultados que cada tiempo aparecen en los medios reflejando la opinión de los ciudadanos.

Lo que parece ser es que los periódicazos, los titulares de la televisión y radios así como el trabajo en las redes sociales son "exitosos" y ello se refleja en ciertas posiciones de la ciudadanía, las que "conocemos" mediante los resultados de las encuestas.

Hará algunos años cierto sector de la sociedad gritaba en las calles," prensa, basura, vergüenza nacional. Hoy está calladito o ¿son los avales militantes de "las causas" del gobierno de turno?