El comunismo a lo largo de decenas de años solo ha producido muerte, esclavitud y miseria; pero paradójicamente nos ha querido vender "un paraíso" de igualdad.
Cómo bien dice un amigo, si Cuba es el "paraíso", ¿por qué miles no se lanzan a las aguas infestadas de tiburones y escapan de Florida rumbo a "la felicidad castrista" o por qué millones de venezolanos se han ido de su país huyendo del chavismo que proclama a cuatro vientos que trabaja para el pueblo?
Ya en otra oportunidad hemos comentado sobre la ex Alemania "democrática" cuya realidad es graficada en la película alemana "La Vida de los Otros" o en "Good Bye Lenin", donde a una anciana le hacen creer que sus vecinos se habían escapado de la capitalista Alemania Federal rumbo al "paraíso socialista" donde la anciana vivía.
Por supuesto los experimentos rojos tienen otros referentes de desastre. La ex URSS, Corea del Norte, los otros países de la Cortina de Hierro y todo lugar donde el comunismo pretendió imponer su modelo perverso. China es otro caso que debe ser analizado aparte.
El comunismo se disfraza de "demócrata", de revolucionario que lucha contra "las injusticias" y de quien busca "un mundo mejor. Atentos con ellos. En el Perú ya los conocemos.
Finalmente, frente a las "guerrillas" conocidas como las financiadas por Cuba, vía URSS; hoy los intentos de destruir la Democracia se dan a través de la difusión de agendas aberrantes y de proyectos corruptores como hemos visto en el caso del Foro de Sao Paulo y las constructoras brasileñas que desde este siglo han promovido un modelo en toda Latinoamérica.
Atentos con los lobos rojos que en la próxima campaña del 2021 se disfrazarán de ovejas.
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