¿De dónde salen los recursos con los que se invierte en la economía? Del ahorro interno, del ahorro externo o de endeudamiento con gobiernos y organismos multilaterales.
El ahorro interno da recursos al sistema financiero para que se canalicen a proyectos de inversión. Por supuesto el ahorro puede servir para financiar iniciativas de los propios ahorristas. De la misma manera el ahorro externo ayuda al financiamiento de empresas o del propio Estado que emiten bonos y otros instrumentos.
En los años 70s y 80s el gran demandante de recursos fue el Estado para financiar proyectos faraónicos y en el peor de los casos para financiar los déficits que originaron políticas económicas fracasadas.
A partir de los 90s lo anteriormente indicado se revertió siendo el sector privado el grande demandante de financiamiento para llevar a cabo proyectos en diversos sectores.
El Estado redujo el déficit y vía concesiones y Asociaciones Público Privadas cubrió la, brecha en infraestructura pero lamentablemente du ersos casos de corrupción han cubierto con un manto de descrédito a estos mecanismos.
Hoy en día, en medio de las dudas y temores que generan el coronavirus las cifras macroeconómicas se han mantenido estables y fuertes pero las dudas empiezan a tomar cuerpo por ejemplo sobre el verdadero nivel de endeudamiento del Perú. ¿Cuánto nos hemos endeudado en la última década, en qué se han usado los recursos, qué beneficios se han logrado y a qué costos?
En el Perú se han invertido muchísimos recursos y no solo las grandes empresas. Millones de micro y pequeños emprendedores, gran parte de ellos informales, han invertido y ello ha contribuído a, qué nuestra economía se mueva aún en épocas de crisis.
Cuando hablemos de inversión, recordemos a los que están al otro lado del mostrador. Sin ahorro no habría desarrollo.
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