Cuando escuchamos a los comunistas hablar de la pobreza se nos viene en mente la cantidad de gobernadores regionales acusados algunos, otros enjuiciados e incluso condenados por corrupción. Ingentes recursos en vez de destinarse en obras para combatir la pobreza han ido a parar a los bolsillos de unos cuantos crápulas.
Quienes hemos recorrido el Perú comprobamos el estado de la infraestructura vial que une poblados rurales. Es una peripecia transitar esos caminos y al llegar a esos lugares constatamos las necesidades de sus pobladores.
Hoy muchos han olvidado lo que han significado los años 80s en los que el Perú fue destruido por el terrorismo no solo en lo material sino la sociedad con muerte y terror.
En 1990 el Presidente Fujimori inició la reconstrucción del Perú. Con sacrificios y trabajo el Perú resucitó. Las obras están vigentes y la población las recuerda. Sin embargo hubo errores y agendas pendientes que se frustraron a fines de los 90s. Tras 20 años, el Perú vuelve a estar en una encrucijada en medio de una crisis sanitaria, económica y social. Miles de muertos, millones de desempleados y cientos de empresas quebradas son el precio que hemos pagado por el accionar de incapaces y corruptos.
"Rescate 2021" se llama el plan que Keiko Fujimori ofrece al Perú para salir de esta crisis. No hay otra alternativa. O votamos por un Perú democrático o nos desbarrancamos con la propuesta comunista del profesor Castillo, quien es parte de un sindicato magisterial ideologizado y culpable del desastre que es la educación peruana.
Castillo es socio politico del corrupto comunista Cerrón que fue presidente regional de Junín y por ello deberá rendir cuentas así como por sus relaciones con el MOVADEF y por algunas actividades "empresariales" poco transparentes.
Que los comunistas no nos vengan a dar lecciones de moral y eficiencia. Ellos destruyeron el Perú en los 80s y desde fines del 2000 están enquistados en el Estado promoviendo el inicio de un segundo "inicio de la lucha armada".
Hoy es el momento de dar pelea. No hay otro camino que votar por Keiko Fujimori.
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