Bien dice mi amigo Rudy que quienes tienen la responsabilidad de elegir a incapaces y corruptos deben ser confrontados. Ya es hora que los "cojudignos" (término acuñado no hace mucho) dejen de lamentarse o tomar distancia sin antes hacer un sincero mea culpa.
Por muchos años la ciudadanía se alejó de la Política (con P) y dejó ella a advenedizos y ígnaros. Hoy pagamos las consecuencias de ello; aunque con esperanza constato que mucha gente ha vuelto a poner su atención en el destino de nuestro país. Las marchas y concentraciones ciudadanas son una muestra fehaciente de ello.
Es hora que el Perú democrático salga masivamente a defender el futuro de nuestra Patria. Es hora que las escuelas y universidades vuelvan a ser ágora donde se enseñe civismo y patriotismo y no sean lugares donde se imparta odio y mentira. Para ello se requiere profesores y catedráticos de verdad y que por cierto los hogares sean lo que siempre fueron, crisoles donde se empiecen a forjar buenos hombres y ciudadanos.
Recordaba con mi mencionado amigo Rudy, con quien compartimos la misma experiencia en Alemania aunque en años diferentes, el respeto por los adultos mayores y niños, por los derechos de los demás así como el cumplimiento de los deberes como ciudadano. Esto hace grande a una Nación. No por ello hablamos de un país que volvió a ser grande tras sufrir los rigores de dos guerras.
Los peruanos hemos sufrido los rigores de una guerra contraterrorista y una inmensa crisis social y económica pero parece que no hemos aprendido.
Hoy estamos regalando el Perú a los herederos ideológicos del terrorismo. Paremos esto de una vez por todas. Queremos vivir en Democracia pero no en una boba. Basta ya de ingenuidad y cobardía.
No al comunismo ¡
Fuera Evo Morales del Perú ¡
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