EN BLANCO

 

2.6% del total de electores de Lima Metropolitana se abstuvo de votar por alguna opción (voto en blanco) en los recientes comicios municipales provincial. 196,726 ciudadanos no creen en nadie. Realmente una cantidad irrelevante. Quizás fueron para no pagar la multa por no votar pero no optaron por un candidato.

Si a ellos sumamos el 21.4%  de ciudadanos que no fueron a votar, el porcentaje ya se convierte en significativo. 24% del total no optó por nadie por acción u omisión. No sumamos a ellos, el 5.8% cuyo voto fue considerado nulo, algo que pudo haberse hecho voluntariamente por algún error atribuible al ciudadano.

¿Qué decir de este importe 24% de la ciudadanía que no expresó su decisión? Un porcentaje de ellos pudo haberlo hecho debido a una situación ajena a su voluntad pero otro lo hizo porque no le importó, por hartazgo o porque no creía en nadie ni nada.

Esto último sí se convierte en peligroso para nuestra Democracia que cada vez parece convertirse en "fallida". Es la gente que quizás ya ha optado irse del Perú porque no ve salida o porque se cansó ya de luchar por un Perú mejor.

Otros, quizás no puedan irse (la gran mayoría) pero ya no le importa nada ("los alpinchistas").

Vemos cómo miles de jóvenes hacen largas espera para asistir a un concierto de un músico de dudosa calidad pero es incapaz de marchar para defender su futuro, su libertad. Otros ya no tan jóvenes y que votan en blanco o no van a votar se abstraen de su obligación pero no sé si sean conscientes de las implicancias de su voto en blanco o de su inasistencia. Estos ciudadanos sufrirán igual de los resultados de presidentes, congresistas, gobernadores o alcaldes incapaces y corruptos a los cuales no pararon a tiempo con su voto.

Si bien cada quien es responsable de lo que hace o deja de hacer, son responsables de ello quienes desde los partidos políticos son incapaces de ofrecer alternativas serias y responsables y presentar candidatos idóneos a los cuales veamos como alternativa.

A esta situación  hay que agregar lo que sucede en el Congreso cuando más de uno en vez de optar por una alternativa, se abstiene de votar a favor o en contra. Los congresistas han sido electos por la opción afirmativa de los electores. No han sido electos con los votos de quien eligió no ir a votar o quien "votó en blanco". Es más de un voto en abstención es una manera cobarde de esconder su decisión. ¿Cuántos de ellos son producto de negociaciones nada santas?

Ya es hora de que se elimine "la abstención" en las votaciones de los congresistas y quienes se amparen en la inasistencia sean drásticamente sancionados incluso -si fuera una práctica frecuente- expectorados de su curul.

El Perú necesita de ciudadanos responsables y que sepan ejercer sus derechos y no de "alpinchistas" o de nihilistas, cuyo accionar le hace el juego a quienes desean destruir el Perú.