El Centro Histórico sigue avanzando con éxitos y fracasos. La Municipalidad de Lima Metropolitana no la ha tenido clara en estos años. Pocas iniciativas, situación amparada en la falta de recursos, como siempre.
Leía a alguien pedir que seamos turistas en nuestra propia ciudad, algo que venimos reclamando desde que empezamos a escribir en este blog, como a ustedes les consta. Y es bueno que otras voces se sumen a ello.
Sin embargo estos pedidos muchas veces chocan con la ineficiencia, la incapacidad y el desinterés. Barrios tradicionales como Monserrate y los Barrios Altos siguen sumidos en el olvido. Varios proyectos siguen parados, sabe uno por qué razones; qué podemos esperar de otros que requieren mayor financiamiento.
Pero no todo es fracaso e inacción. El bar restaurante Estadio reabrió sus puertas en una casona restaurada y sigue brindando un excelente servicio a sus clientes y la zona peatonal de Ucayali-Ica se yergue como importante lugar donde han abierto varios cafés y locales comerciales, dándole una nueva vida a estas cuadras, entre las avenidas Tacna y Abancay; por citar dos ejemplos.
Sin embargo, el ex cine Central sigue cerrado a pesar de promesas de un futuro mejor. De igual forma lo están el antiguo Teatro Colón y locales donde antes funcionaron los cines Imperio, Le Paris, Colmena, Tacna, Metro y Tauro. ¿Acaso no serían lugares para impulsar la cultura?
La Plaza San Martín sigue languideciendo cuando en un momento, años atrás, fue un importante clúster de diversión. Los míticos Directorio y el Mirador desaparecieron “gracias” a la burocracia edil, que no entiende que su rol es de promotor y no para poner trabas.
Es cierto también que la situación económica (frenazo en el crecimiento a raíz de la crisis derivada de la pandemia) ha hecho que varios lugares tambaleen y algunos cierren; sin embargo es momento que se deben sincerar ciertos precios como el de los alquileres de locales, cuyas altos precios (sobrevalorados) impiden que muchos emprendimientos avancen. Y ni qué decir de las trabas “burrocráticas”, como ya manifestamos.
A todo ello, se suma la inseguridad, el desorden tanto en las principales vías que cruzan el Centro Histórico (Colmena, Abancay Y Tacna) como la falta de medidas que permitan poner en valor zonas como las que ocupaban las imprentas. Los locales siguen cerrados y sin visos de que cambie esta situación. Ni qué decir de los cientos de m2 desocupados en el Centro de Lima. ¡Qué tal situación¡ En Europa, el Centro Histórico es uno de los lugares más demandados., sin embargo aquí sigue siendo uno de los últimos lugares en los que se fijan las principales empresas del país.
Mención aparte es la situación de la avenida La Colmena, otrora joya de la ciudad y que hoy luce abandonada. ¿Y hasta cuándo la Plaza 2 de Mayo lucirá con uno de sus edificios a punto de terminar de colapsar o el edificio ubicado en la esquina de La Colmrna con la Plaza San Martín?
Sin embargo, muy a pesar de todo, el Centro Histórico sigue siendo un lugar comercial (por ejemplo el Jirón de La Unión y la adyacente al Barrio Chino) y de recreación donde miles de limeños van a pasar un rato de diversión en los fines de semana. Siempre habrá algo que nos sorprenda, tales como Fiestas Patronales, desfiles costumbristas o los Cambios de Guardia de Palacio de Gobierno. Y ni qué decir de la inmensa oferta cultural que a pesar de todo nos ofrecen diversas instituciones.
Hagamos caso y seamos uno más de los turistas que disfrutan el Centro Histórico, querido a pesar de todos sus problemas. Nos encantará recibir tus comentarios y sugerencias. Hagamos interactivo este espacio de tal manera que la próxima administración del virtual alcalde Rafael López Aliaga haga realidad el sueño de muchos, vale decir la Resurrección del Centro Histórico de Lima.
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