Entrada la tarde nos percatamos que hoy se celebra el trigésimo octavo aniversario de la creación de la Dirección contra el Terrorismo, unidad de élite que con sagacidad y valentía siguió la pista de las organizaciones terroristas hasta su descabezamiento y captura de sus principales cabecillas y mandos.
En sus filas hubo quienes se especializaron en la lucha contra el MRTA (como el General Juan Gonzales Sandoval, el Chacal) y otros en sendero (en especial el Grupo Especial de Inteligencia con el General Miyashiro, el Coronel Benedicto Jimenez, Acero y muchos más).
Recordemos en este aniversario a los creadores del GEIN, a Máximo Agustín Mantilla Campos, al General Reyes Roca, al Coronel Tumba, asesinado por terroristas senderistas.
Cuando hablamos de los detectives de la DIRCOTE, nos referimos a hombres forjados en la paciencia y sagacidad para seguir mínimas pistas hasta llegar a coronar su esfuerzo con golpes certeros y con respeto a los derechos humanos como fue la captura de la cúpula senderista, aquel 12 de setiembre de 1992 cuando lograron el éxito tras no pocas frustraciones.
Viene a la memoria dos personas en especial, las que admiré siempre por su entrega. El Comisario Superior Juan Miranda Zegarra y mi querido primo Óscar Sunohara Merino, el primero ya difunto y el segundo en el retiro de los grandes.
El Perú le debe una deuda impagable a los detectives de la DIRCOTE, quienes nunca han reclamado nada y su mayor satisfacción ha sido siempre el deber cumplido.
Gloria Eterna a la DIRCOTE
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