Ayer se inició el proceso conducente a vacancia de quien irresponsablemente participó en las últimas elecciones y en medio de unas cuestionadísimas elecciones accedió la Presidencia de la República. Esta moción es promovida por la congresista Chirinos y otros 27 parlamentarios.
He escuchado decir que esto trae consigo "ingobernabilidad", como si viviéramos en el mejor de los mundos. Para otros la incapacidad "per se" no implica que sea vacado como si la permanencia ee Castillo no nos conducirá al descalabro como Nación.
Otros como el inefable César Acuña repite lo que algunos pretenden sostener. "No se le acepta porque es campesino". Qué caraduras¡ Al comunista Castillo se le pretende vacar sencillamente porque está poniendo en grave riesgo al Perú.
El país se debate entre algaradas subversivas e intentos por petardear la actividad económica , principalmente la minería y la agroexportación.
En los escasos 120 días existe un preocupante desgobierno. Bloqueos de carreteras, protestas violentas azuzadas por grupos subversivos y diversas denuncias sobre presuntos actos de corrupción que sirven de "gasolina" para avivar lo que es evidente, vale decir preparar un clima que fomente la destrucción de las bases de la República.
El pretexto que arguyen algunos es que solo han transcurrido 120 días como si a los 5 dias de haber jurado no se le hubiera obligado a renunciar al Presidente Transitorio Merino de Lama.
Hoy la vacancia no solo una demanda ciudadana sino un imperativo. El comunista Castillo es solo "garantía" de que el Perú no siga existencia como pais libre. Por tanto, la ciudadanía tiene la palabra. La marcha a favor de la vacancia a llevarse a cabo este 27 no solo debe contar con partidarios de los partidos democráticos sino de todos los actores sociales, entre ellos colectivos independientes, gremios empresariales, estudiantes y otros.
El Perú no puede cruzarse de brazos y esperar que el comunismo destruya a nuestra Patria.
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