¿POR QUE?

Hoy publicamos el artículo 1250 desde que empezamos el 31 de diciembre del 2018. 

Cómo pueden constatar mis lectores, escribo siguiendo los valores y principios que rigen mi vida. No me caso con nadie y menos he sido cómplice de quienes son responsables como autores o cómplices de la desgracia que vive el Perú. Ello me da tranquilidad de espíritu pero también cierra puertas en una coyuntura en la que muchos apuestan por la sobonería propia de reptiles y el actuar al estilo de ciertos roedores.

¿Por qué escribes?, preguntó alguna vez una amistad. Lo hago porque veo la necesidad de  ser un peruano que no calle ante la incapacidad, la corrupción, las aberraciones que promueven ciertos grupos mediáticos y ante la necesidad de enfrentar a los enemigos de la Fe, la Patria y la Familia.

En estos más de 3 años hemos tenido siempre la esperanza de ver un Perú mejor pero hay veces que la realidad nos da una bofetada. Desde el 2011 el Perú no ha parado de retroceder y hemos llegado a un punto en el que estamos a pasos de caer en el precipicio que representa el castrochsvismo.

Sin embargo la Fe nos hace pensar que un país como el Perú, cuna de santos y de gente buena, no caerá. Como lo dijimos anteriormente; cuanto más oscura es la noche, más cercano está el amanecer. Sin embargo, muchas veces nos preguntamos dónde está la verdadera reserva moral de nuestro Perú que haga viable ese amanecer que signifique el renacer de nuestra Patria y ella está más cerca de lo que pensamos; tal como lo vimos cuando nos llegó una foto de dos amigos, Luciano y su esposa Fátima, que conforman un matrimonio ejemplar y digno de seguir.

Seguimos en la brega. Gracias a los que hacen posible-con su generoso apoyo- la continuidad de este blog.

Hasta mañana con la Palabra de Dios, fuente de saber y faro de vida.