Ayer la Comisión de Constitución mandó al archivo el proyecto de ley comunista que pretendía instaurar una dictadura castrochavista a través de la elaboración de una nueva Constitución vía una anticonstitucional Asamblea Constituyente corporativista.
Tras ello escuchamos a los congresistas comunistas amenazar el Orden Constitucional e incluso hablar de cerrar el Congreso. Esa es la manera cómo los comunistas entienden la Democracia.
Con una ignorancia supina hablan de "necesidades del pueblo"; las mismas que no son atendidas por un desgobierno incapaz y corrupto. Con ese mismo desconocimiento hablan de "una dictadura de los votos" como si la minoría sea quien diga qué hacer. La votación fue 11 votos a favor de archivar el proyecto de ley y 6 a favor de aprobarlo.
Castillo y sus cómplices no han podido encontrar mejores pretextos que decir que buscan luchar contra "los monopolios" o peor aún desnudan sus intenciones cuando dicen que quieren volver al Estado Empresario pues cumplir un rol subsidiario es insuficiente. En suma lo que buscan es que el Perú sea otra Venezuela o Cuba o sea "un paraíso" del hambre, miseria y esclavitud.
Los comunistas pretenden hacer tabla rasa del ordenamiento jurídico y hablan de "momento constituyente" cuando solo un 7% de la ciudadanía apoya esta iniciativa.
Un desconocido congresista comunista incluso pretende que el Poder Ejecutivo insista con la propuesta de convocar una Asamblea Constituyente.
El Perú Democrático ha derrotado el intento del comunismo para destruir el Orden Constitucional pero no debemos dejar de estar vigilantes frente a cualquier algarada que busque subvertir la Democracia. Ni ingenuos para creer a los comunistas, ni descuidados ante la amenaza de "un plan b" con apoyo caribeño.
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