¡QUÉ TAL CUAJO!

 

Escuchar hablar a alguien que ha avalado por años al caviaraje y todo lo que esto representa realmente da arcadas. Peor aún cuando éste no es enfrentado con el rigor que se merecía y sobre todo cuando el que estaba frente era alguien que se precia de ser "achorado".

¿Qué pasó? ¿Será que son "amigos", de la misma collera?

Es el gran problema de dar audiencia con guantes de seda o por lo menos sin la rigurosidad que amerita a quien ha defendido a la confesa corrupta Susana Villarán y junto con otros haber avalado por inacción y complacencia (por decir lo menos) la corrupción de los últimos 24 años e incluso haber sido "funcionario" del gobierno fujimorista, al que han atacado luego con todas las armas (las morales y las otras).

Hoy se dan cuenta que no estaba bien los ataques inmisericordes a políticos enemigos pero a los amigos, ni con el pétalo de una rosa. ¿ Aceptanos tanta ingenuidad?

Creemos que todos tienen el derecho a decir "su verdad" e incluso retractarse, sin embargo lo que no tienen derecho es creer que somos babosos y que es suficiente "poner cara de circunstancia" y llamar "al diálogo".

¡Qué pendeivis! Ahora que el andamiaje (como decía el corrupto Toledo) se está cayendo, llaman a conversar a aquellos que fueron blanco de sus ataques y los de su gentita.

No señor¡ Si creen que debemos callar, perdonar y poner la otra mejilla; están equivocados.

Es hora de que todos los que robaron, los cómplices que callaron o aplaudieron y quienes por cobardía no dijeron ni pío  deben pasar "por el aro" de la justicia.

Los culpables deberán "comerse su cana" y los que fungieron de "corte" deberán asumir ser señalados. Recuerden sino qué sucedió en el París liberado de 1944.

Ser blandos, condescendientes o perdonavidas no es el mejor camino. Ellos no tuvieron miramiento alguno cuando  "hacieron jalar el gatillo" a García o cuando , a sabiendas,  destruyeron las vidas de muchos inocentes acusándola falsamente cuando decían ser "la reserva moral" del Perú.

Dejáte de joder Máximo Carlos¡