Hace tres meses concluyó de manera abrupta la usurpación del nefasto ladrón, el comunista Castillo, quien "asumió el mando de la Nación" tras unas elecciones fraudulentas, avaladas por un Sistema Electoral parcializado, por decir lo menos.
Un día antes del golpe del comunista Castillo, el comunicador Phillip Butters en su sintonizado programa COMBUTTERS que se transmite por Willax Televisión hizo pública una denuncia que evidenció indubitablemente el carácter gasteril de lo que se llamaba "gobierno". El denunciante, Salatiel Marrufo, se presentó el día siguiente 7 de diciembre del 2022 en la Comisión de Fiscalización del Congreso de la República. En las horas de la tarde de aquel día se iba a debatir una Mocion de Vacancia contra Castillo. Según cálculos de entonces, hasta antes de la denuncia de Marrufo no había los votos suficientes (87 votos) para vacar a Castillo, incluso aún ante la denuncia mencionada tampoco habria habido los votos necesarios.
Sin embargo algo sucedió en el transcurso de doce horas, cuyas circunstancias se han venido conociendo a cuentahotas, que activó la mecha de "un explosivo" que había sido preparado durante 17 meses y más. Castillo junto con un grupo de cómplices leyó un pronunciamiento subversivo con el cual pretendió romper el Orden Constitucional, medida que duró menos de 90 minutos. El fallido golpista al saber que no tenia el apoyo de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional, menos de la ciudadanía ni de las Instituciones del Estado, fugó cobardemente con dirección a la embajada de México a fin de asilarse. En el camino fue interceptado por una unidad policial de élite (SUAT), detenido y llevado finalmente al establecimiento penal ubicado en la instalaciones de la DIROES en Vitarte, donde permanecerá los proximos 15 meses (ya lleva 3 meses en esa situación).
Tras saberse la detención del golpista, el Congreso vacó a Castillo con 103 votos y se llamó a la entonces Vicepresidente Dina Boluarte para que de acuerdo a lo ordena la Constitución procediera a juramentar como Presidente.
Más de un demócrata aplaudió a rabiar y se declaró "Dinalover" olvidando el pasado oscuro de Boluarte porque dijeron que había que "respetar" la Constitución. Para ello incluso la Subcomisión de Acusaciones Constitucioales no había aprobado una grave denuncia en contra de Boluarte, por lo cual fue habilitada "oportuamente" para asumir la Presidencia.
Tras 3 meses de que Boluarte asumiera la Presidencia el Estado sigue preñado de cómplices del corrupto Castillo; la algarada subversiva continúa en Puno; ningun cómplice del golpista ha sido detenido y menos, alguna medida de gobierno importante ha sido tomada.
Boluarte lo único que ha hecho es presionar a un cada vez más desacreditado Congreso de la República para que apruebe un adelanto de elecciones -que vuelve a estar en cuestión- y casi nada para reestructar el Sistema de Inteligencia que desarme el tinglado subversivo terrorista alumentado con dinero de procedencia delincuencial y el odio y mentiras que Castillo y sus cómplices difundieron durante meses a través de los mal llamados "gabinetes descentralizados". Incluso tras un acertado nombramiento del Coronel (r) EP Liendo como jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia DINI fue reemplazado por un nuevo jefe que hasta hora no muestra resultado alguno.
Han sido 90 días de incapacidad y negligencia para poner orden en el Perú, en especial en la región de Puno. No se sabe si Boluarte no puede o no quiere. Veamos qué dicen quienes dicen que la Presidente "tiene ovarios de acero y los representan".
Como dicen acertados analistas, el Perú está al borde del precipicio. Tras el asesinato de 6 miembros del Ejercito del Perú en Puno ya deberían haber renunciado los responsables politicos que cobardemente han permitido esto.
Es hora de definiciones. 90 días es suficiente para tomar decisiones sino que tome la única que le quedaría: renuncia a la Presidencia.
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