En la edición del mes de marzo de la prestigiosa revista Selecciones se publicó un articulo sobre la propina ("tip"), su significado y qué esperan los mozos y los clientes en cada "lado del mostrador".
En algunos países se carga a la cuenta y en otros como en el Japón no se acepta viéndose incluso como una ofensa. Aquí mismo en el Perú en algunos casos se da lo primero, nos atiendan bien o no.
¿Por qué pagamos propina a un mozo? Muchos propietarios de restaurantes consideran ésta como parte del sueldo. Una parte sale de su caja y otra de la billetera del cliente. Sin embargo, creo, nadie lo ve así. El cliente con la propina premia una atención extraordinaria. Lo "normal" se sobreentiende ya viene incluído en los precios indicados en la carta.
El tema es ¿qué se considera "extraordinario"? Con el boom de la gastronomía en el Perú, un empleo que antes se aprendía con la práctica, hoy se enseña en las diversas escuelas que existen. Hoy un mozo debería saber incluso qué ingredientes tiene un plato. No olvidando, sin embargo, que los mozos estudian cursos de psicologia lo que les permite atender muy bien incluso a clientes "difíciles", aunque hay tambien mozos experimentados que con el tiempo logran desarrollar habilidades que constituyen "secretos" muy birn guardados, los que los hacen no solo muy buscados por los empleadores sino por los clientes que van al restaurante donde atienden.
Sin embargo a menudo nos pasa que quien nos atiende es alguien que llegó al puesto para quedarse en forma pasajera hasta que encuentra "una mejor alternativa". Esto termina ocasionando "costos ocultos" que incluso pueden representar la pérdida de clientes habituales.
Abrir un vino o simplemente una gaseosa y servirla en la copa o en el vaso consideraramos como parte del servicio o sea nada extraordinario sin embargo muchas veces esto no sucede en restaurantes de gama media; por lo que podría parecer que esta atención fuera "extraordinaria".
¿Entonces qué podría ser "extraordinario" para un cliente? Podria ser la recomendación de un plato que no habíamos considerado inicialmente y termine siendo de nuestro especial agrado o que el mozo nos recuerde y llame con nuestro nombre a pesar de haber dejado de ir un buen tiempo.
La atencion gentil y prolija no tendría que ser "algo extraordinario" pero sí factores que influyan en nuestra satisfacción y por ende un complemento a una buena cena. Decimos esto en el entendido que el principal factor de nuestra satisfacción es la calidad de la comida y bebida que preparan la cocina y el bar de un restaurante. Incluso una comida mala o mediocre echa por la borda una atención extraordinaria. Es por ello que en muchos restaurantes las propinas van un fondo comun y distribuidas no solo entre los mozos sino tambien con todo el personal, contraviniendo con la idea de que "las propinas son para los mozos".
Entonces ya lo sabe estimado lector, cuando vaya a un restaurante y disponga de unas monedas extras no olvide de dar propina. Ello no solo es un premio a la atencion sino engrosará sueldos muchas veces algo cortos.
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