ODIO Y MENTIRAS

 

Muchos se sorprenden de lo que vivimos hoy y cómo reina el odio y las mentiras con las que se ha escrito "la historia oficial". Esto no es de ahora.

Y si no creen, acordémonos como el odio hizo que el Presidente Leguía muriera en una cárcel infame, enfermo y pesando 30 kilos. Qué mejor prueba que siempre existió una parte de la ciudadanía que se cebó en sus adversarios a niveles inimaginables.

Otros grandes personajes como Odría y Haya de la Torre, paradójicamente adversarios, fueron blanco de insultos y mentiras  y sus obras físicas e intelectuales fueron objeto de intentos de olvido; algo imposible pues miles de peruanos se han  atendido en esa monumental obra que significa el Hospital Rebagliatti y el pensamiento de Haya de la Torre está cada día mas vigente.

Pero así como hay intereses en estigmatizar a  algunos, se busca crear ídolos de barro cuando han representado momentos oscuros que dieron origen a crisis profundas como fueron los casos de Bustamante y Rivero (1945-1948), Belaúnde (1963-1968 y 1980-1985) y Paniagua (2000-2001). Hoy incluso el Septenato (1968-1975) es visto como "una revolución transformadora" y al periodo de Morales Bermúdez (1975-1980) no se le reconoce el mérito de haber derrotado el proyecto comunistoide de Velasco Alvarado.

Tampoco olvidemos el desastre de García (1985-1990) pero no hagamos lo qué hacen algunos para olvidar su muy buen gobierno del 2006-2011.

Tanto Alan García y Alberto Fujimori han sido objetos de dichos, medio verdades y mentiras. El primero fue inducido al suicidio y Fujimori está secuestrado en prisión pese a tener un Habeas Corpus y un fallo favorable del Tribunal Constitucional. Ambos son víctimas de "la narrativa caviar", la misma que reescribió "la historia" de lo qué sucedió en el Perú en 20 años de terrorismo "gracias" a la Comision de "la verdad", su infame informe y su "lugar de la memoria".

En los últimos 25 años ha primado el odio y "los antis", ello se expresaron en las elecciones en las que incluso a eligió a un ignorante, incapaz, ratero y proterruco. Hoy prima la victimización, el odio de clases (que se inició en el Velascato) y la mentira como propaganda.

Lo que sucede hoy no nació ayer sino desde los primeros movimientos subversivos de los años 60s. El terrorismo senderista resucitó con otras fachadas y otras metodologías y hoy el gobierno incapaz de Dina Boluarte, tal como sucedió con Belaúnde , hace muy poco para combatirlo.

Mientras no combatamos la ideología comunista de nada servirá combatirlos con las armas. Eso quedó demostrado con "el recodo" del asesino Guzmán y lo hecho por el ladrón Castillo.

No olvidemos tampoco combatir al globalismo antipatria que el caviaraje y algunos liberales promueven con loco entusiasmo. 

El Perú está en peligro.