El domingo pasado el diario El Comercio publicó una entrevista a Francis Fukuyama sobre el panorama mundial y también sobre lo qué pasa en nuestro país.
El totem mundial del Nuevo Orden se despachó sobre nuestro país al parecer sin estar muy informado sobre qué pasa aquí y ello lo lleva a decir inexactitudes.
Si bien repite lo que muchos dicen sobre la informalidad y sus consecuencias, erra cuando dice que los informales no tienen beneficios del Estado. Por supuesto que los tienen como salud y educación, si bien escasos y de mala calidad pero no aportan para que sea mejor y esto es la desgracia de un Estado que funciona con los aportes de solo el 30% de la economía.
Si bien es cierto que los informales no gozan de beneficios laborales incluyendo pensiones, sí tienen propiedades pero cuyos títulos de propiedad no están registrados con lo que ello implica, como Hernando de Soto observa bien, Francis aprende de Hernando¡
Por otro lado, en otro momento de la entrevista, Fukuyama se queda anclado en una mirada étnica que la realidad hace rato que superó, por lo menos en el país.Hace rato que la economía no es manejada solo por "una élite blanca" como dice. Sería bueno que leyera a, por ejemplo, Richard Webb o se dé una vuelta por Gamarra, Unicachi o Caquetá. Es la estupidez de quienes quieren reducir el atraso a una lógica de blancos vs mestizos o indígenas.
Fukuyama también se refiere al sector minero y sostiene que produce "ganancias muy concentradas" obviando que este sector aporta impuestos, canon y otros beneficios a los pueblos circundandes a las zonas mineras, los mismos que no son invertidos por un Estado manejado por incapaces y corruptos. A los primeros los menciona en un análisis que hace sobre la capacidad de su burocracia más no a los corruptos que en nuestro país han hecho imposible que la reconstrucción de los años 90s continuara con sus éxitos en la lucha contra la pobreza.
Esos mismos gobiernos que suscriben sus teorías son los que deben responder por el desastre que vive hoy el Perú. Que no sigan hablando de una situación que según ellos hay que retrotraerla a Manco Capac y Mama Ocllo. Estos últimos 9 años han sido fatales para el Perú, desde el gobierno de la "usurpación" hasta "el gobierno de facto" que es parte del "gobierno de lujo y de las mallas de gimnasia".
Fukuyama sostiene también que el Sistema Judicial no es independiente del poder político y "no pueden hacer cumplir leyes básicas".Ahí acierta y describe lo que pasa hoy en el Perú donde reconocidos rateros son reconocidos como grandes señores y sus cómplices gozan de la protección legal que no tiene la gran mayoría. ¿Cómo explicar sino que empresas corruptas sigan haciendo negocios en nuestro país?
Lo cierto que el Perú necesita de su gente con ideas claras como el citado Hernando de Soto y no ser colonia ideológica de gente que pretende implantar un Nuevo Orden en el Mundo financiando a sus "virreyes" e implantando agendas de muerte y aberrantes,
Fukuyama también se queja de un Trump populista, no lo reconoce como un Trump Nacionalista ni conservador, que se ha puesto a trabajar para recuperar una economía venida a menos del izquierdoso de Obama, y profetiza a Biden como una lumbrera cuando la misma gente de su partido considera que es un candidato muy pobre de ideas, finalmente, no confiesa su error garrafal de basar toda su concepción política en la dialéctica y el determinismo histórico marxistoide como si fuesen verdades escritas en piedra y esta orgulloso de su engendro de colocar la teoría de género de la escuela de Franckfurt como política de estado impuesta al mundo en la cumbre de Biejing y planificador político de la agenda mundialista.
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