Dina Boluarte asumió el mando del gobierno pero ¿sabrá en lo que se ha metido? Una pregunta que solo ella y el tiempo lo dirán. Aunque si la comparamos con Castillo, resulta una Einstein.
Ya van dos días y aún no ha jurado el primer gabinete ministerial. ¿Cuánto más tendremos que esperar habida cuenta que se decía que Boluarte se había estado preparando desde hace buen tiempo para asumir el mando de la Nación? Sin embargo la sola presencia de un buen gabinete no garantiza nada más aún si la mencionada no muestra ni experiencia suficiente ni menos logros significativos en su paso por el MIDIS. ¿Qué ministros nos va a imponer? ¿A cómplices de Lava Jato, a prontuariados o los pendejeretes de siempre?
Ahora bien lo importante es saber cuál es horizonte que se avizora para nuestra Patria. ¿Qué hará Boluarte para luchar contra el cáncer enquistado en el Estado? ¿En su mandato se capturará a todos los delincuentes que saquearon el erario nacional, apoyará la tarea del Sistema de Justicia o seguirá la obstrucción a la labor de la Fiscalía?
Ante las pretensiones fuera de lugar del pintoresco presidente de México (apoyando al comunista corrupto), ¿qué posición tomará Boluarte y qué hará respecto a la labor subversiva de los cubanos que fungen de diplomáticos en nuestro país?
¿Cuál será la bancada gobiernista? ¿Que se priorizará como objetivos y qué acuerdos buscará para lograr los resultados que el pais espera? ¿Seguirá dando una parte del Estado a Cerrón o deslindará con el cerronismo corrupto que saqueó el gobierno regional de Junín?
Hay algunos que aún, con una ingenuidad digna de mejores momentos, piensan que Boluarte es una carta democrática pese a que no tiene credenciales ni pasado que garantice un gobierno que busque generar las condiciones para vivir en libertad.
Particularmente no espero mucho de la gestión de Dina Boluarte. Prefiero ser incrédulo que ser uno más de los que decepcionados saltan del barco golpeándose el pecho.
Bien se dice que hay el temor de bajar los brazos y no aprendiendo de la Historia volvamos a sufrir las consecuencias de un gobierno "a lo Vizcarra". Nada nos hace pensar que una radical qué no dijo nada sobre las raterias de Castillo en los diecisiete meses que fue una anodina ministra se transforme en una Presidente que quisiéramos que dirigiera los destinos del Perú.
Veamos si Boluarte es capaz de hablar de austeridad o si no cede a las exigencia de sus nuevos socios caviares, amantes del dinero fácil a través de asesorías y consultorías que no sirven para nada. Así mismo, ¿será capaz de tomar distancias de las recetas estatistas que suscribió como candidata y entiende que solo la inversión privada promueve el desarrollo y el empleo productivo.
¿Qué hará Boluarte ante las exigencias antimineras o frente al proyecto violentista del asesino de policías?
Como ven estimados lectores el futuro no pinta halagüeña. Y si copiáramos a un conspicuo caviar podríamos decir que tenemos dudas de una salida de adelanto de elecciones pero de un gobierno de Boluarte tenemos certezas que sería más de lo mismo; salvo un milagro o que llueva hacia arriba.
Por tanto creemos que si Boluarte quiere pasar a la Historia lo mejor que podría hacer es dar un paso al costado y permitir que uno de los pocos congresistas buenos que existe en el actual Parlamento lleve a cabo una Transición de cara a unas Elecciones Generales.
El Perú no está para más desastres ni para que sigamos "tragándonos sapos" soportando mediocres, incapaces o corruptos.
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